Nuestro reto es movilizar y promover los acuerdos indispensables para el cuidado de la casa común
El compromiso de los partidos Verdes del mundo
El mundo está en un momento determinante de su historia por efecto del cambio climático y la crisis ambiental, que obliga a la sociedad civil, las comunidades, los movimientos sociales, los partidos políticos, el sector privado, los gobiernos y demás actores, a tomar drásticas decisiones de orden económico, político, social, ético y ecológico.
La afectación a los ecosistemas impacta directa e indirectamente el bienestar humano. La pérdida de biodiversidad y el colapso de los ecosistemas se sitúan como uno de los principales riesgos de la próxima década que se estima podrían provocar un descenso del PIB mundial en 2,7 billones de dólares por año de aquí a 2030. Esta recesión económica tendrá un efecto devastador sobre la pobreza, la seguridad, el bienestar social y la desigualdad, así como, sobre la capacidad de inversión pública en acciones de sostenibilidad ambiental.
La Conferencia de las Partes sobre Biodiversidad en su versión 16 a realizarse el mes de octubre de este año en Cali, Colombia, es el escenario propicio para que sobre la evaluación y seguimiento del Marco Mundial de Biodiversidad de Kunming-Montreal, se sienten las bases de la gran concertación global que integre las estrategias sobre mitigación y reversión del cambio climático, con el cuidado de la vida ecosistémica y la biodiversa sobre la Tierra.
Los cambios estratégicos en las decisiones de los Estados, que por sus dimensiones comprometen al menos una generación de por medio, requieren la reorientación en las políticas públicas sobre las expectativas del crecimiento económico, la adopción de medidas estructurales para modificar la relación depredadora entre producción económica y naturaleza, así como la ocupación y poblamiento de los territorios.
Para estos propósitos se requiere la inaplazable inversión de recursos financieros suficientes, públicos y privados, institucionales, técnicos, de investigación social y científica, así como una inversión y actualización en la educación de las nuevas generaciones para que reconozcan y lideren la sostenibilidad de la sociedad humana sobre la Tierra.
Restauración, protección y cuidado de la Amazonía
Las naciones suramericanas con alta interdependencia del ecosistema amazónico, estamos obligadas a poner en el centro de la atención mundial la inaplazable concurrencia de esfuerzos globales para atender la crisis de la Amazonía, una de las reservas de carbono más importantes del mundo con más de 7 millones de km2. Sus bosques son determinantes para la regulación de las precipitaciones, la estabilización de los patrones climáticos regionales y globales, la producción hídrica a gran escala, la contención de la erosión y sobre todo la conservación, tanto de la biodiversidad como de la vida de los pueblos que habitan su territorio.
Priorizar la Amazonía requiere de acuerdos transnacionales, de cooperación transfronteriza y la aplicación de recursos del fondo de “pérdidas y daños”; pero, la demanda de financiación para alcanzar niveles importantes de recuperación global, restauración de su bosque nativo y el impulso a manejos económicos sostenibles, requieren de muchas más fuentes de inversión, entre las que se debe considerar un modelo de canje de deuda pública externa para liberar recursos que financien planes, programas y proyectos de recuperación de la Amazonía.
Ciudades como ejes fundamentales en la sostenibilidad
Se requiere que los gobiernos de las ciudades avancen hacia modelos sostenibles, promoviendo acciones que mitiguen el cambio climático con herramientas de planificación, ordenamiento territorial y destinaciones presupuestales y políticas concretas de desarrollo.
Las ciudades consumen el 78% de la energía mundial y producen más del 60% de las emisiones de gases de efecto invernadero; sin embargo, ocupan menos del 2% de la superficie terrestre. La política de sostenibilidad debe incluir acuerdos de gobernanza de las ciudades e invertir en transformaciones de corto y mediano plazo para que se adapten a las exigencias impuestas por el cambio climático.
La democracia como garantía del desarrollo sostenible
El equilibrio entre sociedad, economía y naturaleza requiere gobiernos comprometidos con la Democracia como sistema que garantiza la deliberación e inclusión de los agentes sociales y comunitarios, las decisiones institucionales, los sectores productivos privados, la alternancia política libre, los acuerdos sobre las rutas y transformaciones necesarias para hacer frente al cambio climático y la preservación de la biodiversidad. No es posible transitar hacia un modelo que priorice la naturaleza sin democracia política, económica, social, ambiental y cultural, que privilegie la vida y el aseguramiento de servicios básicos vitales para todas y todos.
Ante el continuo estancamiento de los acuerdos internacionales, la alternativa es la acción colectiva de los movimientos sociales y el fortalecimiento de las relaciones entre partidos políticos responsables con la agenda del clima, promoviendo la acción pública del Estado para la toma democrática de decisiones con responsabilidad ambiental, económica, social y ética.
Paz con la naturaleza
Los partidos Verdes tenemos el compromiso de liderar las transformaciones políticas, institucionales, normativas y de cultura social y ciudadana a escala global, un llamado para que el mundo priorice el diálogo por encima del conflicto, que se privilegie la paz y la vida por encima de los intereses económicos, se asuma la agenda ambiental y de transformaciones productivas y de consumo.
Es inaplazable la implementación inmediata del Acuerdo de Escazú, que se proteja la vida de los líderes sociales y ambientales que luchan en pro del cuidado de los territorios y las personas. Fortaleceremos las relaciones en América Latina y del Caribe para ampliar el número de Estados que firman y ratifican el acuerdo.
Proponemos avanzar en el reconocimiento de los ríos, ecosistemas y especies como sujetos de derechos, así como, a la naturaleza y los territorios como víctimas de los conflictos. Establecer un diálogo mundial alrededor de las drogas, ya que la expansión de la frontera agrícola para su producción, así como, la imposibilidad de detener el consumo mundial es un flagelo que no solo afecta la salud pública, la paz de los países productores y el bienestar de las comunidades, sino también el ambiente.
Los partidos Verdes del Mundo nos comprometemos
Los partidos políticos Verdes del mundo reunidos en Cali, nos comprometemos a impulsar el cumplimiento de los objetivos de la COP16, y de los Objetivos de Desarrollo Sostenible -ODS-, pero también a trabajar por superar los altos niveles de desigualdad y promover la cohesión entre justicia ambiental, económica y social.
Los Partidos Verdes del Mundo nos comprometemos a liderar y promover políticas públicas nacionales y territoriales que permitan disminuir las diversas fuentes de contaminación ambiental (aire, ruido, agua, suelo), promocionar la transición energética, racionalizar los modelos productivos industriales, cambiar los patrones constructivos urbanos, promover la gestión integral del recurso hídrico, entre otros.
El diálogo ciudadano alrededor de la transformación ambiental, económica y social es fundamental en toda agenda Verde. Nuestro reto es movilizar y promover los acuerdos indispensables para el cuidado de la Casa Común, como requisito de prosperidad humana.